jueves, 30 de julio de 2009

The Living Theatre

Ayer estuvimos en en Living Theatre de NY en una Open Class que ofrece mensualmente el BAW (Bilingual Acting Workshop).

Está situado en el Lower East Side, un barrio lleno de vida nocturna, locales, jóvenes...

Cuesta encontrarlo, y si no lo buscas no lo verás, la puerta pasa desapercibida. Es un bajo con luces, sonido, unas gradas, un pequeño bar, baños y poco más.

Lo que hace de este pequeño espacio un lugar tan especial es que su directora. Judith Malina, alemana de nacimiento, alumna de Erwin Piscator y Julian Beck, que fundó el Living Theatre (junto a Julian Beck) en 1947.

Durante los 50 y 60 se dedicaron a hacer teatro poético fuera de lo convencional, incluyendo a autores americanos y europeos poco producidos en USA como Lorca, Brecht o Pirandello.

Tras los cierres sucesivos de varios locales donde representaba el Living Theatre, a mediados de los 60 empiezan una andadura por Europa intentando llevar el teatro más allá de la mera representación. Planteaban un compromiso con la sociedad, actuaban por un posible cambio.

En los 70 empezaron con El legado de Caín, un ciclo de obras con modelos de actuación no tradicionales.

Los 80 fueron aún mñas allá incluyendo al público en sus ensayos y en las actuaciones.

En 1985 muere el cofundador del grupo, Julian Beck, y un antiguo estudiante del Living Theatre toma las riendas, Hanon Reznikov. Éste ayudará a evolucionar y a enriquecer este grupo durante los siguientes años.

A finales de los 90 y durante el siglo XXI continúan prosuciendo un teatro social, unificando fronteras y culturas. Colaboraciones con Italia, artistas libaneses, anti militarismo, denuncias de abusos políticos, etc. Un teatro activo y con mensaje.

Este fué lo que ayer nos quiso transmitir Melina. Una mujer en apariencia frágil, pero que una vez en pie, llena el escenario con sólo su presencia, emana luz propia. Con una dicción y proyección vocal envidiable, nos explicó que el teatro se basa en el mensaje, no en la técnica. Las técnicas sólo sirven para que los actores hagan llegar el mensaje más eficientemente.

Si no tienes nada que contar que merezca la pena ser escuchado, mejor no subas.

1 comentario:

Jesús Belly 3114 dijo...

Que bonito y que suerte poder visitar ese teatro.
Enhorabuena!!! y Bienvenida.