lunes, 6 de julio de 2009

La estación de Grand Central



La primera línea de ferrocarril que entró en la ciudad de NY fue el "New York Harlem Road" y se construyó en 1831, que hacía el trayecto de la 4th Avenue a la 23rd Street.

A finales de la década de los (18)40 aumentaron los servicios de transporte a NY instalando el New Heaven Railroad y el Hudson River Railroad. Numerosas estaciones, multitud de pasajeros, trasiego incesable de gente que viajaba diariamente a la ciudad.

Hacia el 1858 las locomotoras a vapor fueron prohibidas en las áreas pobladas, por la cantidad de polución que emanaban de la quema del carbón. Nacía también la necesidad de una nueva estación.

Grand Central, la primera, abrió en 1871 sirviendo de enlace para las tres líneas que llegaban a ella. Tras varias ampliaciones y reformas, en 1903 abren un concurso que ganará, tras mucha polémica por enchufes y favoritismos, Warren and Wetmore y Reed & Stem.

La construcción dura 10 años en los que no se ve interrumpido el servicio de ferrocarril, pues seguían utilizando la antigua Grand Central que desapareció en 1910 y hasta la apertura de la nueva usan un almacén en Lexinton que hacía las veces de estación.

La nueva Grand Central está lista y se inaugura el domingo, 2 de Febrero de 1913 a las 12 y un minuto. Ese día acudieron más de 150.000 personas a visitar la terminal.

Durante los 50, debido a una gran crisis económica planearon su demolición para construír oficinas, pero nunca se llevó a cabo. Lo que hicieron fue dividir en parcelas el suelo de la estación y transformarlo en comercios, tal y como lo conocemos hoy en día.

En 1967 lo convierten en símbolo de la ciudad preservándolo de posibles demoliciones. Además en los 80 la conectan con el metro norte, se invierten muchos millones en su restauración y la sala de espera principal se remodela para ser una sala que albergue eventos especiales y exposiciones.


Es un edificio de pequeñas dimensiones (es bajito) en comparación con las torres que lo rodean. Sus formas neoclásicas, sus esculturas, llaman la atención desde el primer momento que ves la piedra de sus paredes.

Dentro es espectacular. La cúpula diáfana del edificio dentral, las constelaciones en el techo, las columnas, el marmol del suelo. El reloj que espera solo en el centro de la sala. Las escalinatas que te llevan a no-sabes-donde... La bandera en lo alto con sus barras y estrellas.

La gente pasa pero no te ve. Los turistas sacan fotos. Las modelos posan en la escalera con el último modelo de ordenador portátil del tamaño de la palma de la mano. La vida pasa y tu miras al techo. Admiras las formas de los dibujos, las pequeñas incrustaciones que parecen estrellas.

-¿Qué hora es?-

- hora de coger el 6 de vuelta a casa-

9 comentarios:

Sensa Testa dijo...

que genial, me encantan las fotos y como escribes... deee seguro eres un experta neoyorquina... por cierto, nos vemos en el reloj a las 6 :D

Adrian Alvarez dijo...

Me gustan tus crónicas, podían llamarse así "Crónicas de Nueva York". Las fotos son estupendas.

Adrian Alvarez dijo...

Increible, consigo publicar un comentario y sale el nombre de Adrián, nunca entenderé esto. Soy Moskis.

MOSKIS dijo...

Esto es un intento de verificación, veamos si lo he conseguido.

MOSKIS dijo...

PRUEBA SUPERADAAAAAAAAAA

BigEyes World dijo...

Jajajajajajaa, te ha usurpado hasta la identidad!!!!

Marcoiris dijo...

Grand Central me gusto mucho cuando estuve alli, y la marea de gente de todo tipo es sencillamente impresionante

Mexiñol dijo...

cuando la gente ve algo todos los días ni se para a admirarlo, pero cuando te alejas por una temporada lo echas de menos

gua dijo...

que buenas fotos hacía bastante que no pasaba por acá. coinsido con Adrian/Moskis en que son muy buenas tus crónicas!